Enfoque

Orientados a Resultados Mensurables desde 1990

Análisis de Conducta Aplicado (ABA)

El análisis de la conducta es la ciencia del comportamiento. El análisis aplicado de la conducta (ABA) es el proceso de aplicación sistemática de intervenciones basadas en los principios de la teoría del aprendizaje para mejorar conductas socialmente significativas en un nivel relevante (Baer, Wolf y Risley, 1968/1987; Sulzer-Azaroff y Mayer, 1991). En concreto, ABA se refiere a un enfoque sistemático de la valoración y evaluación del comportamiento y de la implementación de intervenciones que modifican el comportamiento. En los últimos 30 años, miles de estudios de investigación publicados han documentado la efectividad del tratamiento ABA en una amplia gama de:

  • Poblaciones: Personas con enfermedades mentales, discapacidades del desarrollo y trastornos del aprendizaje
  • Intervencionistas: Analistas y técnicos del comportamiento, padres, profesores y colaboradores
  • Entornos: Escuelas, hogares, instituciones, hogares comunitarios, hospitales y centros de negocios
  • Comportamientos: Lenguaje, habilidades sociales, de aprendizaje académico, de ocio y cotidiano, autolesiones y estereotipos.

Mediciones Confiables – Evaluación objetiva

El ABA es una disciplina objetiva centrada en la medición confiable y la evaluación objetiva del comportamiento observable. Los programas basados en las metodologías ABA se basan en los principios establecidos del aprendizaje y el condicionamiento operante, y están influenciados por los trabajos de investigadores como Edward L. Thorndike y B.F. Skinner.

El uso de diseño experimental de casos aislados para evaluar la eficiencia de las intervenciones individualizadas es un componente esencial de los programas de tratamiento ABA. ​​Este proceso incluye los siguientes componentes que definen un enfoque fiable y responsable del cambio de comportamiento (Sulzer-Azaroff & Mayer, 1991):

  1. Selección de la conducta conflictiva o del déficit de habilidades conductuales
  2. Identificación de metas y objetivos
  3. Establecimiento de un método de medición de las conductas tratadas en la terapia.
  4. Evaluación de los niveles actuales de rendimiento (línea de base)
  5. Diseño e implementación de las intervenciones que enseñan nuevas habilidades y/o reducen las conductas problemáticas
  6. Medición continua de las conductas tratadas en terapia para determinar la eficacia de la intervención
  7. Evaluación continua de la efectividad de la intervención, con las modificaciones necesarias para mantener y/o aumentar tanto la efectividad como la eficiencia de la intervención.

En general, el tratamiento ABA se centra en el proceso de cambio de conducta con respeto al desarrollo de la conducta adaptativa y prosocial y la reducción de conductas inadecuadas. Los “comportamientos socialmente significativos” específicos incluyen los académicos, la comunicación, las habilidades sociales y las habilidades para desenvolverse en la vida. Por ejemplo, los métodos ABA pueden utilizarse para:

  1. Enseñar nuevas habilidades (por ejemplo, los comportamientos socialmente significativos mencionados anteriormente)
  2. Generalizar o transferir el comportamiento de una situación a otra (por ejemplo, de comunicarse con los cuidadores en el hogar a interactuar con los compañeros en la escuela)
  3. Modificar las condiciones en las que se producen las conductas interferentes (por ejemplo, cambiar el entorno de aprendizaje para fomentar la atención al instructor)
  4. Reducir los comportamientos inadecuados (por ejemplo, autoagresión o autoestimulaciones)

Los enfoques de tratamiento basados en el ABA se consideran actualmente a la vanguardia de las intervenciones terapéuticas y educativas para los niños con autismo. En general, este marco conductual utiliza la manipulación de los antecedentes y las consecuencias del comportamiento para enseñar nuevas habilidades y eliminar los comportamientos inadecuados y excesivos. El entrenamiento con Ensayos Discretos es una estrategia de enseñanza de ABA que permite al alumno adquirir habilidades y conductas complejas dominando primero los subcomponentes de la habilidad en cuestión. Por ejemplo, si se quiere enseñar a un niño a pedir una interacción deseada, como “quiero jugar”, se deben enseñar primero los subcomponentes de esta habilidad, como los sonidos individuales que componen cada palabra de la petición, o etiquetar las actividades de ocio agradables como “jugar”. Utilizando técnicas de enseñanza basadas en los principios del análisis de la conducta, el educando es capaz de completar gradualmente todas las destrezas de los subcomponentes de forma independiente. Una vez adquiridos los componentes individuales, se combinan para permitir el dominio de la habilidad compleja y funcional deseada. Esta metodología es muy eficaz para enseñar habilidades básicas de comunicación, juego, motricidad y de la vida cotidiana.

Entrenamiento con Ensayos Discretos (DTT)

Inicialmente, los programas ABA para niños con autismo empleaban únicamente el Entrenamiento con Ensayos Discretos (DTT) por sus siglas en inglés y el plan de estudios se centraba en la enseñanza de habilidades básicas, como se ha señalado anteriormente. Sin embargo, los programas ABA, como el que se aplica en CARD®, siguen evolucionando, haciendo mayor énfasis en la generalización y espontaneidad de las habilidades aprendidas. A medida que los pacientes progresan y desarrollan habilidades sociales más complejas, el enfoque DTT estricto abre paso a tratamientos que incluyen otros componentes. Específicamente, hay una serie de puntos débiles en el DTT, entre ellos el hecho de que el DTT es iniciado principalmente por el profesor, segundo, que normalmente los refuerzos positivos utilizados para aumentar el comportamiento apropiado no suelen estar relacionados con la respuesta objetivo, además, la metodología DTT, a menudo puede generar respuestas memorizadas. Por otro lado, también deben abordarse los déficits en áreas como la “comprensión emocional”, la “toma de perspectiva” y otras funciones operativas, como las habilidades de resolución de problemas, en las que el enfoque DTT no es el medio más eficaz para hacerlo. Aunque la metodología del DTT es parte integral de los tratamientos ABA, pueden emplearse otras estrategias de enseñanza basadas en los principios del análisis de la conducta, como la intervención en contexto natural (NET) por sus siglas en inglés, funciona para abordar estas habilidades más complejas. NET aborda específicamente los puntos débiles antes mencionados del DTT en el sentido de que todas las habilidades se enseñan en un entorno más natural de una manera más ” recreativa.” Además, los refuerzos utilizados para aumentar la respuesta adecuada siempre están directamente relacionados con la tarea (por ejemplo, se enseña a un niño a decir la palabra de un objeto deseado, como un ” carro “, y como refuerzo se le da el carro si responde correctamente). NET es sólo un ejemplo de las distintas estrategias de enseñanza utilizadas en un programa integral basado en ABA. Otros enfoques que no suelen considerarse estrictamente DTT son el aprendizaje sin error y la instrucción basada en la fluidez. En CARD® se utilizan todos los enfoques pedagógicos apropiados basados en los principios fundamentados en el análisis aplicado de la conducta.

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Los proveedores de servicios de terapia basada en ABA deben tener en cuenta muchos factores para ofrecer programas de intervención eficaces. Skills® ofrece a los profesionales todo lo que necesitan para diseñar y gestionar un programa de tratamiento personalizado para cada niño. La evaluación completa y los planes de estudio (incluidas las lecciones dirigidas a conductas complejas, como la toma de perspectiva o la Teoría de la Mente) se combinan con capacidades detalladas de seguimiento de datos y otras herramientas que permiten a los profesionales de ABA maximizar la efectividad y proporcionar tratamientos a más niños, ahorrando tiempo y dinero.

Referencias

Baer, D., Wolf, M., & Risley, R. (1968). Some current dimensions of applied behavior analysis. Journal of Applied Behavior Analysis, 1, 91 – 97.
Baer, D., Wolf, M., & Risley, R. (1987). Some still-current dimensions of applied behavior analysis. Journal of Applied Behavior Analysis, 20, 313 – 327.
Sulzer-Azaroff, B. & Mayer, R. (1991). Behavior analysis for lasting change . Fort Worth, TX: Holt, Reinhart & Winston, Inc.